Hace 10 o 12 años Blatto Sergio, pintor, usaba la misma camisa que los leñadores de Río III, un barba colorada que no le terminaba de crecer y, de la misma manera que Kirk Douglas llevaba la trompeta debajo del sobaco en Luz y Sombras, él llevaba un rollo de papel de dibujar. A Blatto lo podías distinguir entre un centenar de pintores porque caminaba por la ciudad como si oliera sangre y porque los fines de semana ibas a los bailes de Atenas y, mientras cantaba la Mona, él se ponía a dibujar. Nadie como él llegó a traducir con tanta autoridad el espíritu mediterráneo de la jada: Córdoba era una enérgica y caótica conga huracanada y Blatto se había dado cuenta que el piripipí Y el trulalá funcionaban como el himno natural de la ciudad.
Los cuadros estaban bien pintados y parecía que la gloria se lo iba a devorar como a un pescadito, pero hace 10 o 12 años la Mona Jiménez estaba bien para la sociología pero de ninguna manera para el arte, por lo que Blatto tuvo que parar la chata y preguntarse qué es lo que podía hacer un pintor de Río III enfrentado a la realidad. Un niño, el suyo, le salvó la vida: lo vio desnudo en el patio del fondo, hurgando en el interior de una maceta y fue como si le viera el culito propiamente dicho a la Argentina. ! Algún día - se dijo a si mismo mientras la barba le poblaba definitivamente la cabeza y un ardor místico le anegaba la mirada - este país tiene que brotar! ...
Daniel Salzano, poeta.
"Quienes y cuando", sábado 16 de agosto de 1997,
diario "La Voz del Interior", Córdoba.
Catalogo Exposición Museo Municipal de Bellas Artes
"Dr. Genaro Pérez", 1997, Córdoba.